Juan Báez Ibarra (*)
Cuando una empresa inicia sus actividades, recibe dos tipos de inversiones. Uno, considerado como la Inversión Fija, que servirá para la adquisición de maquinaria, muebles, construcción, herramientas, por último, para invertir en propiedades y equipo.
La otra parte de las inversiones se componen de un conjunto de recursos a utilizar de acuerdo a las necesidades financieras de la empresa en el tiempo. Se llama Capital de Trabajo. Estos fondos se asignan a los Stocks, Cuentas por Cobrar, en Caja y Bancos.
El Stock de una compañía está formado y mantenido de acuerdo a las necesidades del mercado de consumidor, por lo que siempre está sufriendo cambios en valor, ya sea en los ítems o en los montos.
Cuanto mayor es la necesidad de invertir en stocks, más recursos financieros a la empresa deben tener.
Las cuentas por cobrar son el resultado de las ventas a plazo, es decir, el cliente lleva el producto y debe pagar más tarde. Por lo tanto, cuanto más tiempo se le da cliente para pagar o cuanto más cuotas de le da al cliente para pagar, más recursos financieros la empresa debe tener que financiar.
En cuentas bancarias y dinero en efectivo que se concentra la cantidad de recursos financieros disponibles de la compañía, lo que significa que la empresa puede utilizar en cualquier momento para cumplir con sus diversos compromisos.
Dependiendo del saldo inicial, entradas y salidas, puede haber una sobra o falta de caja en un momento dado, ya sea día, semana o mes específico.
En este sentido, las decisiones de compra y venta no se pueden tomar sin ningún criterio. Siempre que se tome la decisión de comprar o vender, debe hacerse un análisis y evaluación de la disposición de los recursos financieros de la empresa para eso.
Si se toma una decisión de compra en exceso, la empresa invierte una mayor cantidad de recursos financieros. Si se toma la decisión de dar más créditos a los clientes sobre las ventas a crédito, la empresa también invierte más recursos financieros.
Como en finanzas no existe comida gratis, si los recursos proporcionados por los proveedores para financiar los stocks no son suficientes, la empresa va a necesitar recurrir a los fondos prestados por los bancos o terceros, aportes de capital de socios u otras fuentes. En el caso de préstamos de bancos o terceros, generará una necesidad de pago de intereses, lo que va reducir el Margen de Beneficio del negocio.
Por lo tanto, para Administrar el Capital de Trabajo de la empresa debe evaluar la situación actual de sobras o las faltas de los recursos financieros y los impactos generadas por las decisiones tomadas en relación con las adquisiciones, ventas y gestión de efectivo.
Si quiere Conocer y Aplicar un PASO A PASO para el cálculo de Capital de Trabajo Neto (CTN), Necesidad de Capital de Trabajo (NCT) y Saldo de Tesorería (ST), clic aqui
(*) Dr. Juan Báez Ibarra – Máster y Doctor en Contabilidad por la Fundación Getulio Vargas (FGV) y Universidad de San Pablo (USP) del Brasil, respectivamente. Instructor nacional e internacional en Finanzas, Contabilidad, Riesgos Financieros, Productos y Mercados Financieros, ALD y Gestión Integral de Riesgos. Amplia experiencia Académica y Profesional.